En el último pleno, el actual alcalde provocó descaradamente al anterior portavoz de Cs, ahora concejal no adscrito tras haber abandonado la formación naranja, acusándole de que Cs es quien le mantiene el sueldo en Leganés, y que allí pelotea a Podemos con la intención de entrar a trabajar en una empresa.
El alcalde aprovechó su potestad para intervenir al finalizar un punto del pleno, momento en el que Arranz no tendría derecho a réplica, y así conseguía su objetivo de embarrar a su antiguo número 1, sin que este pudiera responderle.
Pero la cosa no quedó aquí, el ex vicealcalde, Arranz, intentó tomar la palabra para responder al alcalde, pero este último se la negó sistemáticamente, llegando hasta a llamar a la Policía Local para expulsarle del pleno, evitando así que Arranz pudiera responder a las acusaciones que el alcalde había vertido sobre su persona.
Durante su salida escoltado por un Policía Local, el anterior líder de Cs, acusó al que fue su número 2 y actual alcalde de faltarle al respeto y ser un sinvergüenza, de haberse doblegado ante el PSOE y Podemos, y de “ser el roedor más bajo que hay en esta ciudad”.
Mientras Arranz abandonaba el pleno, el actual alcalde aseveró que esta situación era la “crónica de una muerte anunciada”, y en esto precisamente no le falta razón, ya que la tensión entre los concejales de Cs se hizo patente desde el inicio de la legislatura, consiguiendo más titulares por sus luchas fratricidas que por su gestión.
Tenemos un alcalde que aprovecha su posición para desprestigiar a concejales, no siendo la primera vez que lo hace, y que se dedica más a buscarse un futuro político cuando en 2023 su partido desaparezca, que a trabajar por lo que le pagan. Por Alcobendas.
El vídeo del pleno del 27 de enero está colgado en el canal YouTube del Ayuntamiento, empezando la bronca 1h y 25’ después de arrancar el pleno. Les recomiendo que lo vean y saquen sus propias conclusiones.