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Ex alcalde de Alcobendas

No está todo perdido
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No está todo perdido

Ignacio García de Vinuesa

miércoles 06 de marzo de 2024, 09:50h

El pasado 28/M el PSOE recibió una contundente derrota en las elecciones municipales y autonómicas. El 23/J el PSOE volvió a perder unas nuevas elecciones, en este caso generales.

El 18/F el PP obtuvo de nuevo, ya van cinco, la mayoría absoluta en las elecciones en Galicia. El PSOE bajó de los 10 escaños. Peor que nunca.

Luego en solo 10 meses el PSOE ha recibido tres sonoros revolcones, perdiendo todas las contiendas a las que se presentó.

Pero este estrepitoso fracaso no ha modificado en absoluto el rictus de triunfador con el que se pasea por doquier el secretario general del PSOE, a la sazón presidente del gobierno, el inefable Pedro Sánchez.

A Sánchez ya no le queda sitio para una muesca más en su culata de derrotas, pero sin embargo se dirige a los españoles como si hubiera conquistado el más alto poder gracias al apoyo que ha recibido de una mayoría entregada a sus virtudes. Y dice: “somos más”. Otra de sus mentiras. Son cada día menos, y como el, afortunadamente, solo uno.

Sánchez no gobierna por sus virtudes, sino gracias a que ha mercadeado con la dignidad, la ética y la honestidad políticas que, quiero pensar, muchos socialistas todavía defienden.

Sánchez ha comprado su poder, y paga con nuestro patrimonio más preciado: la Constitución, la separación de poderes, la igualdad de los españoles, la verdad, la honradez…

Sánchez gobierna porque se ha asociado a una banda de malhechores políticos para repartirse el botín.

Pero si este tan conocido relato no fuera suficiente para enmarcar al personaje, una nueva estafa aflora ahora para resaltar la degradación que nos envuelve.

Uno de los ministros con más poder en el gobierno de Sánchez, y en el PSOE, fue destituido en el año 2021 por razones que nadie conocía. Y casi tres años más tarde aparecen los motivos, celosamente escondidos por el transparente Sánchez.

La Guardia Civil detuvo hace unas semanas a veinte personas supuestamente implicadas en una colosal trama de corrupción a costa de la venta de mascarillas en plena pandemia.Y resulta que una parte de esta banda se paseaba por los ministerios y gobiernos socialistas recibiendo pedidos. Como Pedro por su casa. Y nunca mejor dicho. Y resulta que no solo consiguieron hacerse millonarios con aquellos contratos, sino que en algunos casos las mascarillas que entregaron no valían ni para trapos. Y quien les pagó lo sabía y calló.

Este es el panorama político que lidera Pedro Sánchez y que nos puede llevar a un pozo sin fondo.

Yo sigo creyendo en nuestra Justicia. No se saldrán con la suya.

El Tribunal Supremo ha abierto una causa a Puigdemont por terrorismo.

No está todo perdido.

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