El pasado 20 de diciembre la Policía Nacional procedió al registro de la vivienda y posterior detención de tres individuos de la misma familia acusados de un presunto delito contra la salud pública. Según han informado las fuentes policiales, los detenidos se dedicaban principalmente a la venta de cocaína y heroína e incluso mezclaban ambas sustancias para la venta de pequeñas dosis. En el registro, la Policía incautó papelinas de heroína, cocaína, mezcla de ambas, hachis y todo ello preparado para su venta. Además se incautaron diversos elementos para la preparación de las dosis como basculas de precisión, numerosos recortes para preparar las papelinas y 2.000 euros en metálico.
La Policía también informa que las investigaciones comenzaron en octubre de 2016 a partir de informaciones que apuntaban a la existencia de un punto de venta de cocaína y heroína en una de las múltiples viviendas ocupadas de menara ilegal en el número 26 de la calle Francisco Largo Caballero, comprobando los investigadores que había un trasiego de toxicómanos en el barrio y accedían a la finca a cualquier hora del día o la noche para adquirir la sustancias estupefacientes o para consumirlas in situ en un cuarto habilitado existente en la finca.
Los detenidos corresponden a la misma familia (padre, madre e hija) y se dedicaban a la venta de sustancias estupefacientes, coordinándose para centrar la venta de las mismas en su domicilio y en las inmediaciones de este, lugar al que acudían un gran número de consumidores. Para conseguir las sustancias estupefacientes, según informan las fuentes policiales, acudían con mucha frecuencia al poblado de Valdemingomez donde adquirían la droga para después venderla a sus clientes, los cuales no solo eran de Alcobendas y Sanse sino de otras localidades del norte. Por este motivo, también ha quedado incautado un coche con el que iban al poblado de Valdmingomez.
Una vez analizados los hechos, el Juzgado número 2 de Alcobendas ordenó su ingreso en prisión