“Alcobendas genera empleo de calidad para el doble de personas que su población activa, tiene superávit en sus cuentas públicas y ha reducido la deuda pública un 40% en sólo 9 meses de gobierno del Partido Popular. La ciudad funciona. Somos la ciudad de las oportunidades de negocio y la calidad de vida.
Sin embargo, Alcobendas (y toda España) tiene un gran enemigo. El presidente Pedro
Sánchez pretende obligar por ley a todos los ayuntamientos a que apliquemos una nueva tasa de tratamiento de residuos que financie el 100% del coste del servicio.
¿Saben lo que eso supondría? El “basurazo” de Pedro Sánchez supone repercutir a los vecinos un coste de entre 11 y 14 millones de euros al año. El socialismo pretende recaudar el próximo 1 de enero de 2025, más de 100 euros anuales a cada vecino de
Alcobendas o 260 euros, de media, por hogar.
Alcobendas eliminó la tasa de basuras en 2007, como principal promesa electoral del
Partido Popular para llegar a la alcaldía tras 28 años de gobiernos de izquierdas. Y mi intención como alcaldesa es no restaurar esta tasa que supone una doble imposición o repago a los vecinos.
El Ayuntamiento de Alcobendas es una administración local completamente saneada y eficiente que ya financia la recogida y el tratamiento de residuos mediante impuestos.
Queremos tener libertad para elegir la forma de sufragar el servicio. No queremos un nuevo copago o repago que aumente la presión fiscal y empeore las condiciones de vida de los ciudadanos.
Pido a los vecinos que nos unamos para evitar imposiciones y nuevas subidas de impuestos “sanchistas”. Libertad y autonomía local. No dejemos que se penalice la buena gestión.”