Los granates empezaron el partido de forma muy ofensiva, lo que les llevó a conseguir un ensayo en el minuto 2 de manos de Nico Paradas tras un gran desplazamiento colectivo de balón hasta el ala.
Debido al nerviosismo provocado por una cita de estas dimensiones, Fede Castilla y Niels Van de Ven se vieron obligados a abandonar el campo en dos lances del juego.
Tomás Granella consiguió aumentar distancias, dejando el luminoso en un 0-8 en el primer cuarto del partido. Viéndose por detrás en el marcador, los rivales consiguieron asediar al Lexus Alcobendas Rugby, que con una gran defensa, consiguió mantener las oleadas de ataques.
Granella se fue expulsado al final de la primera parte, consiguiendo rédito el equipo local de esta acción, sumando tres puntos para dejar el marcador 6-8.
Los granates tuvieron que jugar los diez primeros minutos de la segunda parte con uno menos, hecho que castigó el VRAC Quesos Entrepinares para adelantarse en el marcador. Con un resultado de 13 a 8 se llegó a la última media hora de partido.
Los de Tiki Inchausti supieron responder a esta adversidad y en menos de 10 minutos le dieron la vuelta al marcador, anotando 7 puntos para ponerse 2 por encima de sus rivales.
Los de Valladolid no pudieron superar la férrea defensa de los granates, que se alejaron aún más en el marcador con un golpe a palos.
Con el resultado de 13-18 se llegó al final del partido, convirtiéndose el Lexus Alcobendas Rugby en Supercampeón de España.