Algo huele a podrido cuando la actividad en los despachos, o en los juzgados, supera el interés de las películas que se estrenan. Sobre todo, si entre estas se incluyen títulos como un nuevo episodio de La Guerra de las Galaxias, El puente de los espías –Spielberg y Tom Hanks-, Un paseo por el bosque –Robert Redford-, En el corazón del mar, El desafío –Robert Zemeckis- o Sufragistas –Carey Mulligan y Meryl Streep-.
La noticia avanzada por El País acerca de distintos procesos abiertos contra varios productores por falsear entradas de cine para conseguir subvenciones no es otra cosa que una filtración de una realidad existente a raíz de las protestas por la nueva distribución de dinero público anunciada por el Gobierno de Mariano Rajoy. Esas prácticas, y otras, son de dominio público y las labores judiciales se habían iniciado hace tiempo, aunque sin salir a la luz, afectando a nombres tan importantes como Enrique González Macho –Premio Nacional de Cinematografía y ex Presidente de la Academia-, Gerardo Herrero, Enrique Cerezo y José Luis Garci.
El engaño estaba hecho, la investigación, también. Luego, las protestas de los productores, que pusieron la proa contra el Gobierno del PP, han obligado a reaccionar a éste para que los cineastas no tengan motivos a la hora de alzar demasiado la voz. Esa circunstancia ha hecho que el sector, en general, se sienta dolido porque piensan que se pueden meter a todos los estamentos en el mismo saco. Y eso no es cierto. Además, el cine español goza de buena salud, ya que en 2014 se exhibieron 157 películas patrias fuera de nuestras fronteras, lo que significa el doble de títulos en solo cinco años.
Madrid se mueve, y lo ha hecho en las últimas fechas con la IX Edición de Madrid de Cine - Spanish Film, a lo largo del cual se concedió a relatos salvajes el premio a la película española más taquillera de los últimos doce meses. Por encima de Ocho apellidos vascos, que superó los 56 millones de euros pero tuvo fuera de nuestras fronteras un recorrido menos brillante. Su secuela, Ocho apellidos catalanes, se convirtió en el mejor estreno español de 2015. Nada menos que casi dos millones en su primera semana y llegará hasta los quince millones a final de año. Además, ha tenido lugar la V Edición de la Madrid Premiere Week, donde se han vendido productos nacionales al exterior, y la Octava Semana de Cine Italiano, el primer mercado de nuestros largometrajes, por delante de México.
Y a todo esto, cine. Las cintas anunciadas en el primer párrafo y otra propuesta doméstica con miras de gran producción: Palmeras en la nieve, basada en el texto de Luz Gabas y con casi tres horas de duración. Se presenta un buen mes, así que Felices Navidades
Pedro de Frutos
Si (
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