El movimiento 15-M ha decidido en Asamblea no secundar la marcha antipapa convocada por las asociaciones Europa Laica, Redes Cristianas y AMAL que recorrerá las calles de la capital el próximo día 17 a las 19.30, coincidiendo con la visita del Santo Padre a nuestra ciudad para celebrar la JMJ.
Los indignados, hartos del sistema electoral actual y de la política no han coincidido a la hora de aprobar por unanimidad secundar la marcha antipapa, por lo que se ha decidido que "cada indignado que así lo desee podrá participar en ella". Lo que sí han aprobado ha sido una concentración de protesta al acto frente a la sede del Obispado de Madrid el martes día 16 (dos días antes de la llegada del Papa). Con aparentes prisas de aprobar el respaldo -"sería bueno que diéramos nuestro apoyo", ha manifestado un indignado-, finalmente han sido varios los disidentes que con los brazos en cruz -señal de protesta-, han mostrado su rechazo a "hacer demagogia barata" con los datos económicos.
En concreto e inmediatamente después de que se aprobase la instalación del cartel de la manifestación antipapa que reza De mis impuestos, al Papa Cero acompañado de la imagen de Benedicto XVI tachado, un miembro de la Comisión de Política a corto plazo ha desmentido que los impuestos de los madrileños subvencionen el acto. "La aportación pública es cero", ha señalado.