Según los vecinos colindantes al local de copas ubicado en el Centro Comercial Los Cedros, el “ruido” que, según los residentes, genera este bar no les permite disfrutar del derecho al descanso que tienen por ley todos los ciudadanos.
Lo curioso de la situación es que desde diferentes instancias de los poderes públicos correspondientes se había informado hace no mucho tiempo sobre las soluciones que se iban a tomar para que se dejara descansar a los vecinos como les corresponde. Con tal fin, se informó que el aparcamiento del centro comercial iba a estar cerrado por las noches y así, según explicaban, se iba a reducir el problema, pues además iba a permitir, al ser una parcela privada, actuar a la Policía Local con más celeridad y rigor. Pues bien, desde La Tribuna se ha constatado que este problema no se ha solucionado, pues una vez cierra el bar son muchos los que se quedan en los alrededores, además de gente fumando en la calle.
La situación es peliaguda, pues la Policía vigila que el bar cierre a la hora pero después, todo lo que ocurre, ¿de quién es competencia?
