Regreso a Alcobendas con la confianza de que todos hayáis pasado un buen verano. Nos enfrentamos a un nuevo curso que yo auguraba duro y que, leyendo las noticias de cada día, se ve que va a ser peor. En este escenario, ZP juega a la yenka: primero dice que no sube los impuestos y ahora que sí; su ministra, Elena Salgado, dice que los 85.000 parados más son menos que en agosto del pasado año y, ¡digo yo!, pero cómo no van a ser menos si ya no va a quedar nadie en activo. ¿Nos toman por tontos?
El presidente es un experto en embaucar a los ciudadanos, apelando a la solidaridad con los que menos tienen, cuando lo que pide es que le ayudemos a tapar sus agujeros de las cuentas públicas: el déficit se ha quintuplicado respecto al año anterior. El presidente nos pide un esfuerzo, pero ¿qué esfuerzo pueden hacer esos jóvenes a los que engañó diciendo que no había crisis y que se embarcaron en una hipoteca que no van a poder desgravar y que se encuentran con que deben más dinero de lo que ahora vale su casa?
Por si fuera poco, resulta que ahora hay que mandar más soldados a Afganistán, eso sí, no se crean que van a la guerra, ¡no hombre no!, si no ya estarían en la calle los Bardem y compañía y de momento no se les ve ni a ellos ni a sus pancartas. ¡Otra vez nos toman por tontos! Hay personas que creyeron que “el talante” era suficiente para dirigir un país y que ahora se dan cuenta de que la política es algo más serio. Más de uno, estoy segura, pensará más su voto en los próximos comicios, por lo menos eso espero por la cuenta que nos trae.
Mientras tanto, Alcobendas no se para. Las obras avanzan a buen ritmo; una vez más disculpen las molestias, estoy segura que el resultado merecerá la pena. A la vez hemos reanudado las actividades culturales en nuestro Distrito con diferentes exposiciones, tanto de jóvenes promesas como de artistas consolidados. Nosotros seguimos trabajando por nuestros vecinos, por contener el gasto público, por cumplir nuestros objetivos, y para mejorar nuestra ciudad gobernando con talento y con talante. En definitiva, cumpliendo con nuestra obligación.
María Felicidad Palacio
Concejal del distrito
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