Con alerta al máximo. Así nos pide estar la Guardia Civil ante la aparición de este nuevo tipo de robo. Se le conoce como el método de la siembra. Lo sufrimos sobre todo al volver a nuestro coche y en los cajeros. Los ladrones tiran algo al suelo: unas llaves, dinero. Nos preguntan si es nuestro. Al salir del coche para ver o al agacharnos, aprovechan y se llevan los bolsos del interior de los vehículos o las bolsas que hayamos dejado en el suelo en lo cajeros. Ya hay varias víctimas en distintos puntos del país.
La Guardia Civil ya ha detenido a ocho personas en Madrid vinculadas al “método de la siembra”, un sistema de robo que se ha extendido en parkings de centros comerciales y supermercados, donde los delincuentes se aprovechan de pequeños despistes para apoderarse de objetos personales del interior de los vehículos. A lo largo del último año, se han denunciado más de veinte casos en la Comunidad de Madrid, con un botín superior a los 60.000 euros en efectivo y efectos personales.
El método consiste en que, mientras una persona distrae a la víctima haciéndole creer que ha perdido monedas o llaves cerca del coche, un segundo cómplice roba pertenencias en cuestión de segundos. Esta táctica, sencilla pero eficaz, se despliega habitualmente cuando los usuarios cargan sus compras, momento en el que la atención disminuye. Gracias al análisis de imágenes de cámaras de seguridad y a varias denuncias interpuestas entre enero y mayo de 2025, la Guardia Civil ha conseguido identificar a los presuntos responsables, procediendo a su arresto dentro del marco de la operación Chullo. No se descarta que estén implicados más individuos en esta actividad delictiva.
Modus Operandi
Los autores del método de la siembra suelen actuar por parejas o grupúsculos pequeños.
El primero se acerca con actitud amistosa, señala un objeto supuestamente caído e invita a la víctima a comprobarlo. Mientras la atención de la persona se desvía, otro participante accede al interior del coche y se lleva carteras, bolsos o cualquier objeto de valor a la vista.
La recurrencia de estos hechos en grandes superficies ha puesto en alerta a las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado.
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