Tal y como se establece en el informe, realizado por Madrid Salud, “dada la situación de la pandemia en la ciudad de Madrid, se considera imprescindible la paralización de las obras, salvo aquellas que tengan un carácter de urgencia, fugas de agua o riesgo de colapso de la propia edificación”.
Se considera que, entre otros aspectos, el uso frecuente de furgonetas para los trabajadores; las labores propias en la zona de obras y el transporte del material, que impiden mantener las distancias de seguridad; y el contacto (ya sea en los desplazamientos en transporte público o en las cercanías de las obras) de dichos trabajadores con personas ajenas a la propia obra no hace más que incrementar las posibilidades de otros nuevos contagios.