Viajar es cada vez más caro, una necesidad básica para la mayoría de ciudadanos, todos aquellos que necesitan moverse para trabajar, estudiar o simplemente para disfrutar de unas merecidas vacaciones ven ahora con miedo cómo baja la aguja del depósito de combustible.
La esperanza en que el Gobierno de España ayude se desvanece cada vez más, con cada hora que pasa, con cada declaración de los responsables que tienen la capacidad de actuar. Pedro Sánchez, directamente, se excusa diciendo que el único culpable de la subida de las energías es Vladimir Putin por invadir Ucrania, como si los españoles no llevásemos la inflación desde hace varios meses. Tratar como estúpidos a los ciudadanos que debes representar y proteger no es la solución.
Porque no olvidemos que la gasolina no es lo único que ha subido. Poner lavadoras en la hora valle, como todos sabíamos, no sirve de nada. El pasado martes pagamos 544 euros el megavatio hora, el máximo histórico. Si a los ciudadanos les sale caro poner la lavadora, los autónomos y las pequeñas empresas están pagando tres veces más por la luz que el año pasado, un maltrato constante.
Hoy, poner la lavadora durante una hora cuesta lo mismo que un litro de gasolina, 2€.
Esperemos que tengan buenas mantas en casa, porque con el precio del gas, poner la calefacción es una aventura en la que solo pueden embarcarse aquellos que tengan el sueldo de un político.
Y la subida de la energía afecta a todos los sectores, ahora pagamos más por la luz, por el gas, por la gasolina, por recibir un paquete, por tomar un café… y por primera vez desde que tengo memoria, hay racionamiento de productos, como es el caso del aceite de girasol.
Si (
No(
