Situar un enorme cartel en cada una de las 30.000 posibles obras de España, ya sean pequeñas o grandes, es imprescindible y condición inexcusable interpuesta por el gobierno de la nación para aprobar y pagar las obras.
Descomunal tamaño
El formato del cartel fijado por el Gobierno ha sufrido una evolución y crecimiento sospechosos. En la resolución de 9 de diciembre que desarrolla el decreto dice en su apartado octavo que los carteles tendrán unas dimensiones de 1.5 x 1 metros. Un mes después no le parece suficiente el tamaño, y en la resolución del 13 de enero, el dichoso cartel aumenta a 4 metros x 3, sobre unas patas de 2 metros de altura. Es decir, 4 metros de ancho por 5 metros de alto.
Es necesario reseñar que muchos carteles van a ser más grandes que las obras que anuncian, más caros que la obra que paga el Gobierno, más anchos que las calles a asfaltar y tan altos que van a tapar las ventanas de los vecinos donde se van a poner.
Gasto innecesario
El montante previsto es de más de mil euros, sin contar el gasto de su colocación y retirada. Si se tienen en cuenta los casi 30.000 proyectos que se van a realizar, el despilfarro es superior a los 30 millones de euros. Todo este dinero se recaudará en base a los impuestos que pagamos los españoles.
Protestas de la oposición
El Partido Popular solicita al presidente Zapatero que en vez de despilfarrar más de 30 millones de euros en su propaganda electoral, destine dichos fondos en ayudas sociales inmediatas a quienes más lo necesitan. Y en especial a los 827.000 hogares que no entra ni un sueldo.
“En ocasiones cuesta más la valla que el propio proyecto; en Alcobendas las vallas costarán unos 50.000 euros... con ese dinero se puede dar mucha ayuda social". Esto se parece mucho a una campaña electoral de vallas publicitarias en los municipios de España de cara a las elecciones vascas, gallegas y europeas", afirmó el alcalde de Alcobendas, Ignacio García de Vinuesa.