Tras la muerte del ex líder libio Muamar Gadafi, este jueves se confirmó el fallecimiento de dos de sus hijos Saif al Islam y Mutassim. Ambos murieron en Sirte, al igual que su padre, a manos de tropas del Consejo Nacional de Transición (CNT). Los cadáveres de los hijos de Gadafi fueron llevados al hospital de Misrata, según informó la televisión oficial libia. De los ocho hijos biológicos de Gadafi, cuatro han muerto: Saif al Islam, Mutassim, Jamis y Saif al Arab; y los otros cuatro han logrado escapar: Saadi, Mohamed, Aisha y Hanibal. Rebeldes con las barbas crecidas durante nueve meses repartían caramelos a los viajeros que alcanzaban anoche Trípoli.
Era su modo de darles la bienvenida a una nueva Libia sin Gadafi. Las escenas de celebración se reprodujeron por toda la geografía libia. Caravanas de coches con las luces parpadeando, el ruido del claxon mezclándose con la música alta, exhibiciones y derrapes de vehículos militares y ambulancias, barbacoas al aire libre... Todo era una fiesta ayer en Libia. Las calles de Trípoli estaban invadidas por decenas de jóvenes de uniforme que, orgullosos de su revolución, no se cansan de hacerse notar. "¡Alá Akbar! [Dios es grande]", claman sin querer dejar de pronunciar el que ha sido su grito de guerra. En la ruta de Ras Ajdir (la frontera tunecina) hasta Trípoli, las luces festivas iluminaban las orillas de las carreteras que bordean ciudades como Zuara, Sabratha o Zawiya. Meses antes, estas localidades lucían fantasmales sus fachadas.