Como no podía ser de otra forma, el centro educativo se volcó en dicha visita demostrando para su poco tiempo en activo una organización exquisita.
El acto se dividió en varias fases. En una primera el cardenal fue recibido por los promotores del colegio, Carlos Madruga y Arturo Fernández, celebrando posteriormente la Santa Misa en la capilla del colegio donde no cabía un alfiler, adquiriendo el acto un ambiente que el mismo cardenal calificó de “muy familiar”.
Después de la Santa Misa, Rouco Varela bendijo el colegio y descubrió la placa que recordará la fecha de su presencia en el colegio.
La segunda fase se tradujo en una visita del cardenal por las instalaciones de Valdefuentes, donde tras saludar a la práctica totalidad de los alumnos se celebró un buen comensal en su honor y, tras dedicar una foto a las familias, alumnos y personal del colegio, fue despedido por los alumnos de Primaria que cantaron el himno de la Virgen de la Almudena, Patrona de Madrid y del colegio.