Una organización criminal ha sido desarticulada por la Policía Nacional, la cual utilizaba a jóvenes como "correos" para distribuir hachís. Estos jóvenes se desplazaban en Metro o en patinete hacia distintos puntos de venta en la Comunidad de Madrid, donde se comercializaba la droga. Tras realizar registros en cuatro domicilios ubicados en Alcobendas, San Sebastián de los Reyes y Talamanca de Jarama, se han llevado a cabo ocho detenciones.
El líder de la organización implementaba diversas medidas de seguridad para protegerse de los investigadores policiales y otros grupos rivales. Para evitar ser detectado, llegó a utilizar un dispositivo de inhibición de las frecuencias.
En un comunicado, la Jefatura Superior de Policía de Madrid ha detallado que la entrega del paquete se realizaba en el destino, y que el viaje de regreso incluía la suma de dinero que se había recibido.
El inicio de la investigación tuvo lugar en junio del año anterior, cuando los agentes se enteraron de un posible traslado de sustancias estupefacientes a través de la red de transporte público de Madrid. En ocasiones, para realizar estos viajes hacia destinos más lejanos donde el suburbano no llegaba, recurrían al uso de patinetes eléctricos o al transporte colectivo de pasajeros.