Mi concepto de España o de Patria es más sencillo y menos complejo porque se expresa como sentimiento. Cuando expresas un sentimiento íntimo fluye la sinceridad y la sencillez.
Para mí España es sinónimo de Patria y esta solo la concibo en un marco de sistema democrático. Patria deriva del latín: tierra natal o adoptiva ligada a una persona por vínculos afectivos, jurídicos y/o históricos. Sin libertades no hay Estado democrático y sin democracia este concepto de “vínculo afectivo” desaparece.
Por tanto me identifico con una España que desde la restauración de nuestra democracia, camina y se consolida como el espacio nacional donde todos y todas cabemos, donde todos debemos y tenemos derecho a convivir en pie de igualdad y con el diálogo como método.
Me siento unido a los españoles y españolas de la pandemia que han reaccionado como una piña común y con todos los que arriesgaron su vida para nuestra seguridad (policías, guardias civiles, UME, Protección Civil).
Me siento un español con esos otros españoles, profesores y maestros, laborando para crear mejores y más formadas generaciones. Creo y quiero a esa España de la Ciencia y de la Universidad, investigando, explorando nuevos caminos.
Es mi España "la de los balcones" animando con aplausos de cariño y lágrimas de emoción. Creo en la España de los bomberos y en su ejemplo de honestidad mostrada en la borrasca "Filomena" o en el incendio de Sierra Bermeja. La España de nuestros militares salvando vidas en misiones humanitarias internacionales, esa es mi Patria.
La España de las cajeras y reponedores de supermercados, la de los autónomos y dependientes del comercio, la de los camioneros y taxistas, la de todos aquellos que cuando muchos sentíamos miedo y pavor ante el perverso contagio de la pandemia, allí estuvieron. Esa es la España que quiero y amo.
Me siento hermano de todos los españoles que desde el andamio, el tractor, las aulas, los hospitales, las oficinas, los establecimientos hosteleros, las residencias, los polideportivos, las empresas y los emprendedores hacen país. Fraternizo con todos los que desde distintos ámbitos del trabajo, hacen día a día patria con su esfuerzo, su sudor y a veces incluso con sus lágrimas.
Soy “español” de esa España y “abanderado” de esa enseña que a todos nos cobija. Soy de la "España de los españoles", de todos. En esa España me encontraréis siempre.