Termina el sondeo telefónico a los vecinos de las Urbanizaciones

El equipo de gobierno del Partido Popular que dirige el Ayuntamiento de Alcobendas tiene la intención de recalificar la tipología del suelo de unas parcelas situadas en el principio del Camino Ancho. El objetivo del ejecutivo que comanda Ignacio García de Vinuesa es modificar de terciario a residencial unas parcelas cuya superficie es de 78.000 metros cuadrados. Para aprobar semejante intención hay que añadir que el PP necesita el apoyo, mediante voto afirmativo o abstención, de otros dos concejales de la corporación. Decimos esto porque no es asunto fácil para el gobierno municipal conseguir que el resto de formaciones se sume a su propuesta si tenemos en cuenta la polémica que se ha suscitado entre los vecinos de La Moraleja. Por este motivo, el Ayuntamiento ha contratado a la empresa Metroscopia para realizar un sondeo entre 400 vecinos del distrito para que opinen que prefieren, si mantener el uso terciario para que se construyan oficinas o cambiar el uso del suelo, como propone el PP, para que se puedan construir 725 pisos en esta zona geográfica. La consulta ha estado en vigor hasta el pasado 22 de marzo y la decisión del sondeo no es vinculante para futura decisiones del consistorio.

Esta consulta telefónica también ha levantado ciertas dudas entre los vecinos de La Moraleja puesto que las quejas a estas obras vienen de la Entidad de Conservación de esta urbanización y no del resto de entidades que representan a los vecinos del resto de urbanizaciones. Por este motivo, es entendible que desde la entidad se ponga en tela de juicio que se pregunte a todos los vecinos del distrito cuando la disputa se debate en torno a La Moraleja. Desde el Ayuntamiento se argumenta esta decisión de consultar a los vecinos del distrito diciendo que "estas obras afectarían a todos los vecinos, tanto del Soto, La Moraleja o El Encinar". Con este argumento, el consistorio admite entre líneas que permitir la construcción de centenares de casas en La Moraleja afectaría al resto de urbanizaciones y sobre todo en lo que se refiere al tránsito de vehículos y a un aumento de la población que en el caso de La Moraleja, supondría caso doblar a su número de habitantes. Este repunte "desmedido" de residentes es una de las quejas expuestas por el Consejo de la Entidad de Conservación de La Moraleja, mientras que el consistorio asegura que de las 725 viviendas sólo se harán 425 pisos, lo que haría que se reduzca el número de "nuevos" vecinos.

Por otro lado, la tipología de las viviendas que se quieren construir en La Carrascosa B también llama la atención, ya que en La Moraleja no existen pisos ni bloques parecidos. La Moraleja es una zona residencial con viviendas unifamiliares y chales independientes o adosados en urbanizaciones privadas. La simple propuesta de construir bloques de pisos es una novedad que no cuadra nada con la idiosincrasia de la urbanización.